El mítico Julio. De sobra conocido en el imaginario del fútbol español de los 80 y los 90, siempre resulta interesante recuperar a una de las figuras más representativas del panorama nacional de este deporte. Delantero centro nacido en Bilbao, se formó en Lezama para pasar al primer equipo en el año 1984 donde solo jugó dos temporadas. Después firmó por el Atlético de Madrid, club en el que también permaneció dos cursos en los que pudo jugar habitualmente aportando goles y peligro en cada encuentro. Pero aún mejor le fue con el FC Barcelona en seis temporadas (siendo las tres primeras de especial relevancia), una etapa donde consiguió reunir un espléndido palmarés con Ligas y Copa de Europa incluidas. Completaría su carrera profesional jugando con el Deportivo de La Coruña, Sporting de Gijón, Yokohama Marinos de Japón (convirtiéndose en el primer futbolista español en jugar en el país asiático) y el Deportivo Alavés, donde colgó las botas en el año 2000. Además, participó en 56 partidos con la selección española anotando 22 goles. Los bailes con Predrag Spasic o su clamoroso fallo contra Italia en el Mundial 94 forman parte de la historia del fútbol español. Algo zapatones, era un experto en fijar defensas y en rematar todo lo que le llegaba con un amplio catálogo de disparos picudos o poco ortodoxos, pero muy efectivos. Es hermano del también exfutbolista Patxi Salinas, defensa central que jugó durante su carrera para el Athletic y el Celta de Vigo. Posteriormente a su retirada ha sido frecuente verle en la pequeña pantalla en espacios futbolísticos, pero también en realities y otros formatos televisivos.
Julio Salinas
El mítico Julio. De sobra conocido en el imaginario del fútbol español de los 80 y los 90, siempre resulta interesante recuperar a una de las figuras más representativas del panorama nacional de este deporte. Delantero centro nacido en Bilbao, se formó en Lezama para pasar al primer equipo en el año 1984 donde solo jugó dos temporadas. Después firmó por el Atlético de Madrid, club en el que también permaneció dos cursos en los que pudo jugar habitualmente aportando goles y peligro en cada encuentro. Pero aún mejor le fue con el FC Barcelona en seis temporadas (siendo las tres primeras de especial relevancia), una etapa donde consiguió reunir un espléndido palmarés con Ligas y Copa de Europa incluidas. Completaría su carrera profesional jugando con el Deportivo de La Coruña, Sporting de Gijón, Yokohama Marinos de Japón (convirtiéndose en el primer futbolista español en jugar en el país asiático) y el Deportivo Alavés, donde colgó las botas en el año 2000. Además, participó en 56 partidos con la selección española anotando 22 goles. Los bailes con Predrag Spasic o su clamoroso fallo contra Italia en el Mundial 94 forman parte de la historia del fútbol español. Algo zapatones, era un experto en fijar defensas y en rematar todo lo que le llegaba con un amplio catálogo de disparos picudos o poco ortodoxos, pero muy efectivos. Es hermano del también exfutbolista Patxi Salinas, defensa central que jugó durante su carrera para el Athletic y el Celta de Vigo. Posteriormente a su retirada ha sido frecuente verle en la pequeña pantalla en espacios futbolísticos, pero también en realities y otros formatos televisivos.